Si Antonio Brown no era intocable como agente libre antes para los equipos de la NFL, es casi seguro que ahora lo es.
El viernes, la NFL anunció que el ex receptor abierto de los Steelers sería suspendido por ocho juegos como resultado de una violación de la política de conducta personal de la liga. Junto con su suspensión, la NFL le indica a Brown que continúe recibiendo asesoramiento y tratamiento.
La liga había estado investigando a Brown después de que un artista que trabajaba en su casa lo acusó de conducta sexual inapropiada el año pasado debido a un incidente que, según ella, ocurrió cuando trabajaba allí en 2017.
También se declaró inocente en junio por un delito de robo con cargos de batería relacionado con un incidente en enero con una empresa de camiones de mudanzas en su casa en Florida.
Las cosas iban en espiral para Brown. Esto parece ser solo una capa más. Esta vez, sin embargo, no parece arremeter ni apelar la decisión de la NFL.
En una publicación de Instagram el viernes, Brown dijo que está listo para nuevos comienzos.
Al parecer, tomará un tiempo para que comience ese nuevo comienzo. Al menos si se trata de estar en la NFL.
